Bienvenido/a, esta es tu casa.

Queridos AMIGOS:

La comunidad educativa-pastoral del Colegio Salesiano “San Francisco Solano” os da la bienvenida. Con mucha ilusión y esperanza renovada comenzamos esta “nueva y apasionante aventura educativa”. Estoy seguro y más que convencido de que estará llena de “sueños”, emociones y miles de experiencias educativo-pastorales. Nuestra apuesta por una vida cargada de proyectos e ilusiones compartidas y vividas entre todos aquellos que formamos esta gran familia, nos lleva a renovar nuestro compromiso con aquellos que dan sentido a lo que somos y hacemos: nuestros queridos jóvenes.

Comenzamos un nuevo curso mirando hacia adelante, ¡siempre hacia adelante!, porque queremos hacer realidad un PROYECTO que estamos diseñando y construyendo entre todos, para visualizar, como COMUNIDAD, el colegio salesiano de Montilla. Trabajamos, “aquí y ahora”, por dar forma a un proyecto que tiene en el centro de sus inquietudes y preocupaciones la persona del joven. Por ellos, en ellos, con ellos y entre ellos… tiene sentido TODO lo que hacemos. Ellos serán los que den sentido a nuestro quehacer diario, a nuestra respuesta educativo-pastoral cotidiana, a los que miraremos y atenderemos, y en los que nos reflejaremos em todo momento, de modo que siga haciéndose realidad, 125 años después, aquel legado pedagógico y salesiano: enseñar y educar a BUENOS CRISTIANOS Y HONRADOS CIUDADANOS.

Desde estas líneas quisiera transmitiros nuestro agradecimiento por la confianza depositada en nosotros. Formaremos, junto a vosotros, personas COMPETENTES, COMPROMETIDAS, COMPASIVAS, CREATIVAS Y COHERENTES. Puedo aseguraros, que los educadores de esta Casa estamos haciendo realidad en todos los “espacios y momentos” de nuestro vida escolar aquel mensaje que se convierte hoy en reto y compromiso salesiano: “No basta con amar a nuestros alumnos. Ellos deben darse cuenta de que son amados por sus educadores” (Don Bosco).

El lema de este año está inspirado profundamente en el Evangelio de Jesús. El objetivo es impregnar todo el curso (asignaturas, actividades, planes, proyectos, etc.) de esta idea que transmite el lema, difundiéndolo y transmitiéndolo a todos: ¡SOMOS FUTURO, SOMOS ESPERANZA! Esta será nuestra inspiración educativa. Cobra sentido y especial intencionalidad la llamada a seguir viviendo en clave pastoral, a construir la necesaria Escuela en pastoral que nos piden y demandan nuestros jóvenes.

Un curso más, os invito a mirar en la misma dirección y a mantenernos unidos en un mismo espíritu de familia, pese a las dificultades o incertidumbres que puedan aparecer. Estoy convencido de que todas ellas las superaremos y convertiremos en oportunidades y fortalezas que nos animarán a dar lo mejor de nosotros, a “pastorear” (educar y enseñar) con creatividad y visión profética. Nuestro estilo educativo salesiano garantizará la consecución de este hermoso proyecto de vida.

Con el deseo y la esperanza de que el curso que ahora iniciamos, transcurra felizmente para todos, aprovecho, en nombre del Claustro y en el mío propio, para ponernos a vuestra disposición y colaborar en todas aquellas circunstancias que lo precisen. Recordando la idea inicial de estas palabras de bienvenida, reitero nuestro compromiso por trabajar por la felicidad y formación integral de nuestros queridos jóvenes, vuestros hijos… ¡nuestros alumnos!

Recibid un cordial saludo.